me dice mi amigo rafa que lea a amy hempel
y yo soy dócil para estas cosas
pero, antes, necesito ver su cara
más que su cara, su gesto
hempel es una de esas mujeres
a las que no les importa parecer una bruja
porque se saben bellísimas
seguro que la niña amy ya llevaba el pelo así
largo y enredado
ahora, además, lo lleva blanco
sin teñir
qué maravilla
qué envidia me dan las mujeres guapas
(quiero decir, valientes)
para colmo, la veo sentada junto a palahniuk
el hombre que más me desconcierta del mundo
(¿es un genio o un perfecto trilero?
¿lleva o no silicona en los labios?)
pero, oh, mi querida hempel
al bajar el cursor descubro algo terrible
parece que las letras de tu nombre hayan bailado
(metidas en tus zapatos,
esos que luces para dejarme espantada)
y ahora te llames temple
¿¡unas bailarinas doradas de leopardo!?